Huawei acelera la producción de chips avanzados para reducir la dependencia tecnológica de China
Imágenes satelitales recientes revelaron que Huawei está desarrollando una línea de producción de chips avanzados en Guanlan, distrito de Shenzhen, China. Este proyecto forma parte de una estrategia nacional para fortalecer la industria de semiconductores y disminuir la dependencia de tecnologías extranjeras. Según el Financial Times, la iniciativa representa un esfuerzo clave de Huawei por posicionarse como un actor dominante en sectores estratégicos como la inteligencia artificial (IA).
Infraestructura en expansión
La construcción de estas instalaciones comenzó en 2022, y desde entonces ha avanzado a gran velocidad. Las imágenes satelitales muestran un crecimiento acelerado de fábricas con un diseño arquitectónico uniforme, reflejo del enfoque sistemático de Huawei. La empresa opera una de las tres plantas principales del complejo, enfocada en la fabricación de procesadores de 7 nanómetros para smartphones y chips de IA de la línea Ascend.
Ecosistema colaborativo
Además de Huawei, otras dos fábricas del complejo son operadas por startups chinas: SiCarrier, especializada en equipos de chips, y SwaySure, proveedora de memorias. Aunque Huawei niega vínculos directos con estas compañías, fuentes del sector afirman que ha colaborado en áreas como financiamiento, reclutamiento y transferencia tecnológica. Ambas cuentan con respaldo económico del gobierno de Shenzhen.
Un ambicioso plan de independencia tecnológica
La planta de Huawei incluirá líneas para la producción de chips propios y tecnologías vinculadas a su proyecto de conducción autónoma. Aunque la construcción está por concluir, se estima que la planta tardará al menos un año en entrar en operación plena, ya que la empresa busca depender exclusivamente de equipos fabricados en China.
La expansión de Huawei se produce en respuesta a las sanciones impuestas por Estados Unidos desde 2019, que limitaron su acceso a tecnologías críticas. Estas restricciones aceleraron la estrategia de la empresa para controlar toda la cadena de suministro de chips, desde la fabricación de wafers hasta el desarrollo de modelos de IA.
El chip 910C y el futuro de la IA china
Huawei también alista el lanzamiento del chip de inteligencia artificial Ascend 910C, una evolución del 910B. El nuevo diseño combina dos procesadores en un solo paquete, duplicando su potencia de cómputo y capacidad de memoria. Parte de sus componentes se fabrican en China mediante la tecnología de 7 nm de SMIC, aunque con bajos rendimientos, mientras que otros provienen de TSMC, a través de la empresa china Sophgo.
Este uso indirecto de tecnología extranjera ha encendido alertas en Washington. El Departamento de Comercio de EE.UU. investiga la implicación de TSMC luego de detectar chips de diseño chino fabricados por esta empresa taiwanesa, a pesar de las restricciones vigentes.
Desafíos y tensiones geopolíticas
Aunque Huawei enfrenta limitaciones técnicas frente a competidores con más experiencia en la fabricación de semiconductores, cuenta con sólido apoyo estatal y ha captado talento e inversiones clave del ecosistema tecnológico chino. Sin embargo, la presión internacional, especialmente desde Estados Unidos, se mantiene firme. En 2022, Washington incluyó a SiCarrier y SwaySure en su lista de entidades restringidas, acusándolas de colaborar con Huawei en tecnología con posibles fines militares.