Procrastinación y como se combate


La procrastinación, ​ postergación o posposición es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables por miedo a afrontarlas o pereza a realizarlas.

Superar la postergación es un desafío común, pero con las estrategias adecuadas, puedes manejarla de manera efectiva.

Si te encuentras atrapado en este problema, afectará seriamente tu productividad. Aquí tienes varios consejos que pueden ayudarte a dejar de postergar:

  • Divide las tareas en pasos más pequeños: Las tareas grandes pueden parecer abrumadoras, lo que lleva a la postergación. Divídelas en partes más manejables y concéntrate en completar un paso pequeño a la vez.

  • Establece metas y plazos claros: Define lo que quieres lograr y para cuándo. Tener metas específicas y plazos puede proporcionar la motivación que necesitas para comenzar y mantener el rumbo.

  • Utiliza técnicas de gestión del tiempo: Técnicas como la Técnica Pomodoro, donde trabajas durante 25 minutos y luego tomas un descanso de 5 minutos, pueden ayudarte a mantenerte enfocado y productivo.

  • Elimina las distracciones: Identifica qué te distrae comúnmente (por ejemplo, teléfono, redes sociales) y toma medidas para minimizar estas distracciones cuando estés trabajando en tareas.

  • Prioriza las tareas: Utiliza un sistema de prioridades (por ejemplo, matriz urgente-importante) para identificar qué tareas deben hacerse primero. Esto ayuda a asegurar que te estés enfocando en las tareas más importantes.

  • Crea un entorno productivo: Organiza tu espacio de trabajo para minimizar las distracciones y hacerlo propicio para trabajar. Un espacio de trabajo ordenado y dedicado puede mejorar significativamente la productividad.

  • Practica la autocompasión: No seas demasiado duro contigo mismo por postergar. Reconócelo como un problema común y anímate gentilmente a empezar a trabajar en las tareas.

  • Recompénsate: Establece un sistema de recompensas por completar tareas. Saber que hay una recompensa esperando puede ser un motivador poderoso.

  • Busca responsabilidad: Comparte tus metas con alguien más, un amigo, familiar o compañero de trabajo, y pídeles que te ayuden a mantenerte responsable.

  • Comprende tu postergación: A veces, la postergación es un síntoma de problemas subyacentes como el miedo al fracaso o el perfeccionismo. Comprender por qué postergas puede ayudarte a abordar la causa raíz.

  • Desarrolla una rutina: Establecer una rutina de trabajo consistente puede ayudar a reducir la postergación con el tiempo, a medida que tu mente se acostumbra a ser productiva durante ciertas horas.

  • Utiliza herramientas y aplicaciones: Hay varias aplicaciones y herramientas diseñadas para ayudar a gestionar el tiempo, hacer un seguimiento de los hábitos y bloquear distracciones. Experimenta con ellas para encontrar lo que más te ayuda.

Implementar estas estrategias puede ser un proceso de ensayo y error. Es importante encontrar lo que funciona mejor para ti y tener paciencia contigo mismo mientras trabajas para cambiar tus hábitos. Recuerda, superar la postergación se trata de progreso, no de perfección.